Trifle de tarta de queso y chocolate con Baileys: el postre cremoso más irresistibleCapas de tentación con crema irlandesa, queso y chocolate en cada cucharada


Introducción

El trifle de tarta de queso y chocolate con Baileys es un postre que conquista a primera vista y enamora al primer bocado. Combinando la suavidad del queso crema, la intensidad del cacao y el inconfundible toque de la crema irlandesa Baileys, este postre en capas es una verdadera delicia para los amantes del chocolate y de los sabores con carácter.

Ideal para ocasiones especiales, cenas con amigos o simplemente para consentirte, este postre no necesita horno y está listo en pocos minutos. Se sirve en vasos individuales, lo que lo hace perfecto para presentaciones elegantes sin complicarte. A continuación, te enseñamos cómo prepararlo paso a paso.


Ingredientes (para 6–8 vasitos individuales)

Para la capa de tarta de queso de chocolate:

  • 450 g de queso crema, a temperatura ambiente (aprox. 16 oz)
  • 120 g de azúcar glas (1 taza)
  • 30 g de cacao puro en polvo sin azúcar (1/4 taza)
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • 1/2 cucharadita de sal marina
  • 60 ml de crema irlandesa Baileys (1/4 taza)

Para la crema batida de chocolate:

  • 240 ml de nata para montar muy fría (1 taza)
  • 2 cucharadas de crema irlandesa Baileys
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • 2 cucharadas de cacao en polvo sin azúcar
  • 2 cucharadas de azúcar glas

Para la base y capas crujientes:

  • 20 galletas Oreo, trituradas (aprox. 200 g)

Instrucciones paso a paso

1. Preparar la capa de tarta de queso de chocolate

  1. En un bol mediano, bate el queso crema con el azúcar glas, el cacao en polvo, el extracto de vainilla y la sal marina hasta que esté suave y sin grumos.
  2. Añade la crema irlandesa Baileys y continúa batiendo hasta obtener una mezcla cremosa, ligera y aireada.

2. Preparar la crema batida de chocolate

  1. En un bol frío aparte, bate la nata para montar hasta que comience a espesar.
  2. Añade el Baileys, la vainilla, el cacao en polvo y el azúcar glas.
  3. Continúa batiendo hasta que se formen picos firmes y la crema mantenga su forma.

3. Preparar las galletas Oreo trituradas

  1. Coloca las galletas Oreo en una bolsa resistente y tritúralas con un rodillo o base de vaso hasta formar migas gruesas.
  2. Reserva una pequeña cantidad para decorar al final.

4. Montar los trifles

  1. Usa mangas pasteleras para facilitar el montaje de capas limpias, aunque puedes hacerlo con cucharas si lo prefieres.
  2. En cada vaso o cuenco, coloca una base de migas de Oreo.
  3. Añade una capa de la mezcla de tarta de queso de chocolate.
  4. Continúa con una capa de crema batida de chocolate.
  5. Repite el proceso para formar una segunda ronda de capas, terminando con la crema batida.

5. Decorar y servir

  1. Con una boquilla de estrella abierta, decora la parte superior con un remolino de crema batida.
  2. Espolvorea con las migas de Oreo reservadas.
  3. Sirve inmediatamente o refrigera hasta el momento de servir (aguanta bien unas 2–3 horas).

Consejos y trucos

  • Para una textura más ligera, puedes sustituir parte del queso crema por mascarpone o ricotta batida.
  • Baileys al gusto: Si prefieres un sabor más intenso, añade 1 o 2 cucharadas extra de Baileys en la mezcla de tarta de queso. Si lo haces, reduce un poco el azúcar.
  • Versión sin alcohol: Puedes sustituir el Baileys por crema de café sin alcohol o por leche condensada aromatizada con vainilla.
  • Personaliza los vasos: Usa copas de vino, tarros de cristal o vasos bajos para una presentación elegante.
  • Apto para hacer con antelación: Aunque se recomienda servir en el mismo día, puedes montar los trifles con unas horas de antelación y mantenerlos en frío cubiertos con film transparente.

Conclusión

El trifle de tarta de queso con chocolate y Baileys es un postre elegante, fácil y absolutamente delicioso. Cada capa aporta una textura distinta y un sabor que se complementa con armonía: la cremosidad del queso, la intensidad del cacao, el toque licoroso del Baileys y el crujiente de las Oreo. Un postre sofisticado que no requiere horno y que está listo en apenas 20 minutos.

Sorprende a tus invitados (¡o a ti mismo!) con esta delicia en vaso que combina lo mejor de una tarta de queso y un mousse de chocolate con el inconfundible sello de la crema irlandesa.

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