¿Buscas una receta fresca, original y fácil de preparar? Este tiramisú salado de tomate y mozzarella es la opción perfecta para sorprender a tus invitados con una versión diferente del clásico postre italiano. Elaborado con ingredientes mediterráneos como el pesto, el queso mascarpone, las tomates maduras y la mozzarella di bufala, es ideal para una entrada veraniega, una cena ligera o un aperitivo elegante.
Ingredientes (para 4 personas)
- 250 g de queso mascarpone
- 3 tomates maduros
- 2 bolas de mozzarella di bufala
- 100 ml de nata líquida para montar
- 1 diente de ajo
- 1 cucharada de pesto de albahaca
- 8 galletas saladas tipo TUC o crackers neutros
- Hojas de albahaca fresca
- Sal y pimienta al gusto
- Un chorrito de aceite de oliva virgen extra
Preparación paso a paso
Paso 1: Preparar los ingredientes principales
Lava los tomates y córtalos en rodajas finas. Escurre bien la mozzarella y córtala en dados pequeños. Reserva ambos ingredientes en frío.
Paso 2: Preparar la crema de mascarpone
En un bol, mezcla el mascarpone con la nata líquida, el pesto y el ajo picado muy fino. Añade sal y pimienta al gusto. Bate ligeramente hasta obtener una crema suave y homogénea.
Paso 3: Montar el tiramisú
Tritura groseramente las galletas saladas y colócalas en el fondo de vasos individuales o de una fuente de cristal. Esta base crujiente aportará textura al plato.
Añade una capa de rodajas de tomate y, encima, una capa de mozzarella. Cubre con una capa generosa de la crema de mascarpone.
Paso 4: Repetir las capas
Si tienes espacio en los recipientes, repite las capas: galletas, tomate, mozzarella, crema. Esto dará más cuerpo y equilibrio al tiramisú.
Paso 5: Decorar y enfriar
Finaliza con algunos trocitos de tomate y mozzarella por encima, un chorrito de aceite de oliva y unas hojas de albahaca fresca para decorar.
Lleva al frigorífico durante al menos 2 horas para que se asienten los sabores y la textura se afiance antes de servir.
Consejos y trucos para un tiramisú salado perfecto
Elige ingredientes frescos y de calidad: En una receta con pocos componentes, cada ingrediente cuenta. Usa tomates maduros y jugosos, mozzarella de búfala auténtica y un pesto artesanal para un sabor más auténtico.
Mejora la textura: Puedes tostar ligeramente los crackers antes de triturarlos para un extra de crocancia, o incluso probar con pan tostado si lo prefieres.
Dale un toque personal: Añade unas aceitunas negras en rodajas, piñones tostados o un chorrito de crema de vinagre balsámico para intensificar los sabores mediterráneos.
Versión ligera: Si prefieres una versión más liviana, sustituye la nata por yogur griego natural, manteniendo el mascarpone para conservar la cremosidad.
Presentación cuidada: Sirve en copas o vasos transparentes para lucir las capas coloridas, o en una fuente de vidrio grande si lo prefieres al centro de la mesa.
Este tiramisú salado de tomate y mozzarella es una propuesta fresca, elegante y diferente, perfecta para sorprender a tus comensales con una fusión entre tradición italiana y sabores mediterráneos. Sin necesidad de horno, es ideal para el verano, acompañando con una copa de vino blanco seco o una limonada casera bien fría.