¿Te encanta el sabor cálido y especiado del pan de miel? Este pastel esponjoso y húmedo lleva ese clásico aroma a un nuevo nivel con una cobertura de chocolate irresistible. Ideal para acompañar un café o sorprender en cualquier ocasión.
Ingredientes (métricas europeas)
1)Para la masa:
- 250 g de harina de trigo
- 200 g de azúcar moreno
- 1 cucharadita de bicarbonato de sodio
- 1 cucharadita de levadura química
- 1 cucharadita de canela en polvo
- 1 cucharadita de clavo de olor molido
- 1 pizca de nuez moscada
- 250 ml de leche caliente
- 125 ml de miel
- 125 ml de mantequilla derretida
- 2 huevos
2)Para el jarabe:
- 125 ml de leche
- 1 cucharada de miel
- 1 cucharada de cacao en polvo
3)Para la cobertura:
- 300 g de chocolate con leche o chocolate semiamargo fundido
Instrucciones paso a paso
1. Mezcla los ingredientes secos
En un bol grande, combina la harina, el azúcar moreno, el bicarbonato, la levadura, la canela, el clavo y la nuez moscada. Mezcla bien para distribuir los sabores.
2. Bate los ingredientes líquidos
En otro recipiente, bate los huevos con la leche caliente, la miel y la mantequilla derretida. Asegúrate de que todo quede bien incorporado.
3. Une los ingredientes
Vierte la mezcla líquida sobre los ingredientes secos y remueve con una espátula o batidor manual hasta obtener una masa homogénea y sin grumos.
4. Hornea el pastel
Engrasa un molde rectangular o redondo y vierte la masa. Lleva al horno precalentado a 180°C y hornea durante 35 a 40 minutos, o hasta que al insertar un palillo salga limpio.
5. Prepara el jarabe
Mientras el pastel está en el horno, mezcla en una cacerola pequeña la leche, la miel y el cacao en polvo. Calienta suavemente hasta que todo se disuelva bien y retira del fuego.
6. Humedece el pastel
Al sacar el pastel caliente del horno, pincha con un tenedor o palillo por toda la superficie y vierte el jarabe tibio para que lo absorba por completo. Esto le dará una textura extremadamente jugosa.
7. Cubre con chocolate
Una vez que el pastel se haya enfriado un poco, cubre con el chocolate fundido, alisando con una espátula para que quede bien distribuido.
Consejos y trucos
- Miel de calidad: Usa una miel pura y aromática para un sabor más profundo.
- Toque extra: Puedes abrir el pastel a la mitad y rellenarlo con dulce de leche para una versión aún más golosa.
- Variación de especias: Si no tienes clavo o nuez moscada, puedes usar jengibre en polvo para una nota más fresca y picante.
- Decoración: Espolvorea nueces picadas o virutas de chocolate por encima para un acabado más vistoso.
Este pastel jugoso de pan de miel con chocolate es una fusión perfecta entre lo tradicional y lo indulgente. Un postre que conquista tanto por su sabor como por su textura húmeda y rica. Ideal para servir en otoño, invierno o simplemente cuando quieras consentirte.