Un pastel helado siempre es una excelente idea para refrescar los días calurosos, pero este pastel helado de masa de galleta con chispas de chocolate lleva la experiencia a otro nivel. Es cremoso, crujiente, dulce, refrescante y con ese irresistible sabor a galleta casera que conquista desde la primera cucharada. Ideal para celebraciones, reuniones familiares o simplemente para darse un gusto en casa. Esta receta te mostrará paso a paso cómo prepararlo de forma sencilla, utilizando ingredientes fáciles de encontrar y con algunos consejos para lograr una textura perfecta y un sabor inolvidable.
Ingredientes (medidas europeas)
- 500 ml de helado de masa de galleta con chispas de chocolate, ablandado
- 120 g de galletas con chispas de chocolate, trituradas
- 90 g de chispas de chocolate
- 180 ml de crema para montar (mínimo 35% de grasa)
- 50 g de azúcar
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 60 ml de ganache de chocolate
Cómo hacer pastel helado de masa de galleta con chispas de chocolate
1. Preparar el molde
Forra un molde desmontable de unos 20 cm de diámetro con papel pergamino en la base y en los laterales. Esto facilitará desmoldar el pastel una vez congelado.
2. Primera capa de helado
Vierte la mitad del helado ablandado en el fondo del molde. Con una espátula, alísalo para que cubra de manera uniforme toda la base.
3. Capa de galletas
Espolvorea las galletas trituradas sobre la capa de helado. Presiona ligeramente con una cuchara para formar una capa compacta y uniforme.
4. Primera congelación
Lleva el molde al congelador durante al menos 2 horas, o hasta que la capa esté completamente firme.
5. Preparar la crema batida
En un bol grande, bate la crema para montar junto con el azúcar y el extracto de vainilla. Usa una batidora eléctrica a velocidad media-alta hasta obtener picos suaves. La mezcla debe estar firme pero cremosa.
6. Agregar la crema
Saca el molde del congelador y extiende la crema batida sobre la capa congelada de galletas. Alisa con una espátula para obtener una superficie pareja.
7. Decorar con ganache y chispas
Rocía el ganache de chocolate por encima de la crema, formando hilos o remolinos con una cuchara. Luego esparce las chispas de chocolate sobre la superficie para un toque crujiente y decorativo.
8. Segunda congelación
Vuelve a colocar el pastel en el congelador por al menos 2 o 3 horas más, hasta que esté completamente firme y bien integrado.
Antes de servir
- Retira el pastel del congelador y deja reposar a temperatura ambiente durante unos 10 minutos antes de desmoldarlo y cortarlo. Esto facilitará el corte y permitirá disfrutar mejor de su textura.
- Sirve acompañado de una taza de café caliente para crear un contraste delicioso entre lo frío del pastel y el calor del café.
Consejos y trucos para un pastel helado perfecto
1. Elige un buen helado
Utiliza un helado de calidad con un sabor intenso a masa de galleta. Si no lo encuentras, puedes usar helado de vainilla y añadirle trozos de galleta y un poco de esencia de mantequilla.
2. Textura ideal
Asegúrate de que el helado esté ablandado pero no derretido del todo al momento de montarlo, para que sea fácil de manejar sin perder su estructura.
3. Galletas crujientes
Tritura las galletas hasta obtener trozos medianos: no demasiado finos para que aporten textura crujiente al pastel, ni demasiado grandes para no dificultar el corte.
4. Ganache casero
Si deseas preparar tu propio ganache, mezcla 100 g de chocolate negro con 100 ml de nata caliente. Deja reposar un minuto y luego mezcla hasta obtener una crema suave y brillante.
5. Añade un toque gourmet
Prueba agregar una capa de caramelo salado entre el helado y las galletas o espolvorear una pizca de sal marina por encima del ganache para realzar los sabores.
6. Conservación
Este pastel puede mantenerse en el congelador bien cubierto hasta por una semana. Para conservar su sabor y textura, envuélvelo en papel film y colócalo dentro de un recipiente hermético.
Por qué este pastel helado es ideal para el verano
El pastel helado de masa de galleta con chispas de chocolate combina la frescura del helado con la textura de las galletas y la riqueza del chocolate. Su preparación es sencilla, no requiere horno, y puede hacerse con antelación. Es el postre perfecto para compartir y sorprender a tus invitados en una tarde calurosa. Además, su presentación es muy vistosa, ideal para ocasiones especiales o simplemente para disfrutar de un capricho dulce hecho en casa.