Pastel de Queso Ricotta con Cerezas: Una Deliciosa Receta para Endulzar tu Día

El pastel de queso ricotta con cerezas es un postre suave y cremoso, ideal para quienes buscan un dulce refrescante y fácil de preparar. Su combinación de queso ricotta, jugo de limón y la suavidad de las cerezas en almíbar lo convierten en una opción perfecta para cualquier ocasión. Sigue esta receta paso a paso y disfruta de un pastel de queso irresistible que se convertirá en uno de tus favoritos.

Ingredientes:

  • 500 gramos de queso ricotta
  • 2 limones (jugo)
  • 4 yemas de huevo
  • 1 lata de leche condensada (aproximadamente 397 gramos)
  • 2 paquetes de galletas Marías molidas (aproximadamente 200 gramos)
  • 1 barra de mantequilla (aproximadamente 90 gramos)
  • 1 cucharadita de ron
  • Cerezas en almíbar (al gusto)

Preparación:

Paso 1: Precalentar el horno

Comienza por precalentar el horno a 250°C para asegurarte de que esté bien caliente cuando coloques el pastel de queso.

Paso 2: Preparar la mezcla de queso

En una licuadora o procesador de alimentos, agrega el queso ricotta, la leche condensada, las yemas de huevo, el jugo de los dos limones y la cucharadita de ron. Licúa todo a alta velocidad hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Esta mezcla será la base cremosa del pastel.

Paso 3: Preparar la base de galletas

En una sartén grande, derrite la mantequilla a fuego bajo. Una vez derretida, apaga el fuego y agrega las galletas Marías molidas. Revuelve bien con una cuchara hasta formar una masa que tenga un color dorado y una textura algo seca. Esta mezcla servirá como la base crujiente de nuestro pastel.

Paso 4: Preparar el molde

Engrasa un molde para pay o refractario con un poco de mantequilla para evitar que el pastel se pegue. Luego, vierte la mezcla de galletas molidas en el fondo del molde. Usa los dedos o una cuchara para presionar la mezcla y formar una costra uniforme en el fondo.

Paso 5: Hornear

Con el molde listo, vierte cuidadosamente la mezcla cremosa de queso ricotta sobre la base de galletas. Coloca el molde en el horno precalentado y hornea durante 40 minutos. Durante este tiempo, el pastel debe dorarse ligeramente en la parte superior y fijarse en el centro.

Paso 6: Dejar enfriar

Una vez transcurridos los 40 minutos, apaga el horno y deja el pastel dentro para que se enfríe lentamente. Esto ayudará a que el pastel se estabilice mejor. Cuando el pastel esté a temperatura ambiente, colócalo en la nevera y refrigéralo durante varias horas, o hasta que termine de cuajar por completo.

Paso 7: Decorar y servir

Antes de servir, decora el pastel con cerezas en almíbar al gusto. Las cerezas no solo añaden un toque de color vibrante, sino que también aportan un delicioso contraste con la suavidad del pastel de queso.

Consejos y Trucos para un Pastel Perfecto:

  1. Consistencia del queso ricotta: Si no encuentras queso ricotta, puedes usar queso crema como sustituto. Asegúrate de que el queso esté bien batido para evitar que el pastel quede con grumos.
  2. Base crujiente: Si prefieres una base más crujiente, puedes hornear la mezcla de galletas por 10 minutos antes de agregar la mezcla de queso, lo que permitirá que se endurezca un poco más.
  3. Personalización: Añadir un toque de vainilla o canela en la mezcla de queso le da un sabor aún más profundo. Experimenta con otros frutos en almíbar, como duraznos o fresas, si quieres variar la decoración.
  4. Tiempo de refrigeración: Aunque puedes comerlo después de que esté frío a temperatura ambiente, la textura del pastel de queso mejora después de pasar algunas horas en la nevera. Refrigéralo durante al menos 4 horas, idealmente toda la noche.
  5. Presentación: Si deseas impresionar a tus invitados, puedes servirlo en porciones individuales usando pequeños moldes de silicona. Así no solo será fácil de servir, sino que también tendrá una presentación más elegante.

Conclusión:

El pastel de queso ricotta con cerezas es un postre sencillo pero delicioso, ideal para cualquier ocasión. Con una base crujiente de galletas Marías y una mezcla suave y cremosa de queso ricotta, es el dulce perfecto para finalizar cualquier comida. Siguiendo estos pasos, lograrás un pastel que encantará a todos los que lo prueben. ¡Anímate a prepararlo y disfruta de un sabor fresco y delicioso!

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